Tenía pensado escribir este post el pasado domingo después de la boda entre Chiara Ferragni y Fedez, pero dejé pasar unos días porque la euforia del momento muchas veces juega una mala pasada. Así que dejé pasar unos días y decidí publicar un resumen de su boda con buenas fotografías y extenso coincidiendo con su primera semana como casados. Pensaba que durante este tiempo iba a cambiar de opinión, pero realmente no ha sido así, sino que aún me gusta más su boda.
Debo decir para empezar que puede que no sea objetiva, aunque siempre lo intento, pero soy seguidora de Chiara y escucho muchísimo la música de Fedez. No es de extrañar con esto que os cuento que estuviese deseando verlo todo al momento bajo la etiqueta creada para la ocasión: #TheFerragnez. Como no podía ser de otra manera en la vida de una influencer, todo fue compartido al momento y su boda tuvo un impacto social mayor que la boda entre los Duques de Sussex.
Todo comenzó el viernes 31 de agosto, día en que los invitados llegaron a Sicilia en un avión privado. La novia y su pequeño Leo habían llegado un par de días antes para ultimar detalles y hacer la prueba final del vestido. Esa misma noche se celebró la cena de ensayo en el Palazzo Nicolaci que servía como bienvenida y que ya dejaba entrever los dos adjetivos con los que para mi se define esta boda: emotividad y diversión. Para este primer evento Chiara llevó un diseño exclusivo de Prada rosa de seda con un sobrevestido blanco de organza decorado con cristales transparentes y bordados de lentejuelas, escote en uve tanto por delante y por detrás y con detalles dorados, combinado con complementos melocotón, un sencillo recogido, sombra de ojos brillante y labios coral. Un look totalmente acorde con la decoración de la cena, pues estaban todos invitados esa noche al Club The Ferragnez.
Tras esa noche de fiesta loca y discursos de familiares llenos de emotividad que dejaron a los novios llorando de felicidad y emoción, llegó el gran día. El lugar elegido para la ceremonia fue Dimora delle Balze. Ahí pudimos ver por primera vez el diseño de Alta Costura exclusivo de Dior que llevó Chiara Ferragni y que a todos les pareció muy regio y bastante recatado, pero que yo, al menos, esperaba por su parte. Siempre había dicho que su novia preferida era Grace Kelly, así que era de esperar que fuese algo similar. De todas maneras, el diseño a pesar de ser más rectado y clásico tenía mucho de Chiara: se trataba de un mono de crochet de media manga y cuerpo de cisne sobre el que iba una impresionante falda de tul y velo prendido a un recogido. Así de espectacular llegó del brazo de su padre Marco Ferragni y precedida por sus damas de honor. En el altar la esperaba Fedez vestido por Versace. Fue una ceremonia tremendamente emotiva por los preciosos votos que se dedicaron los novios. Tras la ceremonia, fuegos artificiales multicolores y las típicas fotos de familia, para luego pasar a cenar a una cueva de luces que me pareció mágica. Y hubo segundo vestido, esta vez mucho más Chiara y con una silueta Dior muy reconocible. Era un diseño mucho más especial pues los bordados en la falda hacían alusión a la historia de amor de la pareja, como los versos de la canción que Fedez le dedicó y un león por su bebé. Y tras cenar, se cambió la falda por unan corta con capas de tul y a disfrutar al Luna Park creado para la ocasión.
Créditos: David Bastianoni: 1 / 2 / 3 / 7 / 8 / 9 / 10 / 11 / 12 / 13 / 14 / 17 - Sophia Carre para Vogue: 4 / 5 / 6 / 15 / 16
Debo decir para empezar que puede que no sea objetiva, aunque siempre lo intento, pero soy seguidora de Chiara y escucho muchísimo la música de Fedez. No es de extrañar con esto que os cuento que estuviese deseando verlo todo al momento bajo la etiqueta creada para la ocasión: #TheFerragnez. Como no podía ser de otra manera en la vida de una influencer, todo fue compartido al momento y su boda tuvo un impacto social mayor que la boda entre los Duques de Sussex.
Todo comenzó el viernes 31 de agosto, día en que los invitados llegaron a Sicilia en un avión privado. La novia y su pequeño Leo habían llegado un par de días antes para ultimar detalles y hacer la prueba final del vestido. Esa misma noche se celebró la cena de ensayo en el Palazzo Nicolaci que servía como bienvenida y que ya dejaba entrever los dos adjetivos con los que para mi se define esta boda: emotividad y diversión. Para este primer evento Chiara llevó un diseño exclusivo de Prada rosa de seda con un sobrevestido blanco de organza decorado con cristales transparentes y bordados de lentejuelas, escote en uve tanto por delante y por detrás y con detalles dorados, combinado con complementos melocotón, un sencillo recogido, sombra de ojos brillante y labios coral. Un look totalmente acorde con la decoración de la cena, pues estaban todos invitados esa noche al Club The Ferragnez.
Tras esa noche de fiesta loca y discursos de familiares llenos de emotividad que dejaron a los novios llorando de felicidad y emoción, llegó el gran día. El lugar elegido para la ceremonia fue Dimora delle Balze. Ahí pudimos ver por primera vez el diseño de Alta Costura exclusivo de Dior que llevó Chiara Ferragni y que a todos les pareció muy regio y bastante recatado, pero que yo, al menos, esperaba por su parte. Siempre había dicho que su novia preferida era Grace Kelly, así que era de esperar que fuese algo similar. De todas maneras, el diseño a pesar de ser más rectado y clásico tenía mucho de Chiara: se trataba de un mono de crochet de media manga y cuerpo de cisne sobre el que iba una impresionante falda de tul y velo prendido a un recogido. Así de espectacular llegó del brazo de su padre Marco Ferragni y precedida por sus damas de honor. En el altar la esperaba Fedez vestido por Versace. Fue una ceremonia tremendamente emotiva por los preciosos votos que se dedicaron los novios. Tras la ceremonia, fuegos artificiales multicolores y las típicas fotos de familia, para luego pasar a cenar a una cueva de luces que me pareció mágica. Y hubo segundo vestido, esta vez mucho más Chiara y con una silueta Dior muy reconocible. Era un diseño mucho más especial pues los bordados en la falda hacían alusión a la historia de amor de la pareja, como los versos de la canción que Fedez le dedicó y un león por su bebé. Y tras cenar, se cambió la falda por unan corta con capas de tul y a disfrutar al Luna Park creado para la ocasión.
Créditos: David Bastianoni: 1 / 2 / 3 / 7 / 8 / 9 / 10 / 11 / 12 / 13 / 14 / 17 - Sophia Carre para Vogue: 4 / 5 / 6 / 15 / 16
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